
"Ya los restos el encuentro yacen muertos y húmedos, a los pies de la cama.
Marea de sabanas enredan las piernas. La mejor de las condenas es la eternidad en tu red.
Pronto va a amanecer y tendré que levantarme, mientras duermes yo contemplo tus párpados cerrados y tu mueca de sonrisa, cada vez que beso tus mejillas.
Las horas, cómplices del amor, pasan mejor y duelen mucho menos junto a vos...
Giras y me das la espalda, el ultimo de los abrazos antes que suenen las 11. Nos espera una tarde y otra noche para amarnos. Pronto va a amanecer y tendré que levantarme, mientras duermes yo contemplo tus párpados cerrados y tu mueca de sonrisa, cada vez que beso tus mejillas."
(P@L - 2007)
